El Covid 19 sin dudas generó en México una crisis económica que si se acude directamente a los datos oficiales, hubo una caída durante el 2020 del PBI de aproximadamente entre 7% y 10%. Eso generó pérdidas de empleos que se cuentan por miles, reducciones de ingresos, cierres de empresas, entre otras problemáticas que llevaron a que los usuario del sistema financiero tengan numerosos incumplimientos a la hora de pagar créditos, por ejemplo.
A partir de eso fue que muchas entidades bancarias tomaron la iniciativa de forma inmediata de comenzar a crear fondos de riesgo. Estos tienen como objetivo primordial poder cubrir posibles saldos vencidos de usuarios de préstamos. Si sólo se tiene en cuenta el 2020, dichas reservas aportadas por distintos bancos crearon un fondo que en la actualidad es cercano a 218 mil millones de pesos, creciendo así más del 21% en relación a años anteriores.
Afirma la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), mediante sus informes, que estos fondos son específicamente previsionales a los fines de que en caso de que sucedan muchos créditos impagos, el impacto no sea demasiado grande y se pueda afrontar con mayor tranquilidad. Esto es más que importante, toda vez que en la actualidad, si se analiza de cuánto es la cartera de crédito total, se alcanzan montos que son de más de 5 billones de pesos.
Ahora bien, lo que hicieron los bancos fue crear reservas específicamente para cada tipo de crédito. Por ejemplo, un primer tipo de crédito que podemos tomar como referencia es el de consumo, en donde los fondos destinados a cubrir posibles saldos impagos, llegaron hasta 96 mil millones de pesos. Por otro lado están las tarjetas de crédito, que es el tipo de producto que mayor cantidad de saldo vencido tiene, y en ese caso, los fondos de reserva de los bancos son por casi 50 mil millones de pesos.
Pero claro, esos dos tipos de créditos no son los únicos que en México se ofrecen en decenas de bancos, sino que también hay muchos otros. Las provisiones que fueron creando queremos destacarlas de la siguiente manera: en créditos personales, hay nuevas reservas por un monto estimado que es de 19 mil millones; en créditos de nómina, por 18 mil millones: en financiamiento de vehículos por 8 mil millones; y finalmente en uno de los préstamos más importantes para las familias mexicanas como es el de vivienda, las reservas creadas a fines de prevención, son cercanas a 16 mil millones de pesos.
Desde la Asociación de Bancos de México (ABM) indicaron que del total de fondos reunidos por los bancos, un 19% son reservas que las instituciones financieras aportaron de manera estrictamente voluntaria, sin requerimiento de ninguna autoridad. Todas estas medidas de creación de reservas, sirve también sin dudas para que los bancos puedan seguir brindando los préstamos con mejores condiciones, debida cuenta de que si tienen complicaciones en los cobros, indefectiblemente también los tendrán a la hora de prestar el dinero que muchos usuarios necesitan para cubrir múltiples necesidades.