Aun con la mala experiencia del 2020, antreros se arriesgarán a invertir para abrir sus negocios en la Feria Nacional de San Marcos 2022. La Verbena abrileña ya está a la vuelta de la esquina y los dueños de antros, bares y cantinas han empezado a tramitar sus permisos, aunque cerca de un 10% de los empresarios ya los tienen pagados desde el 2020, cuando se suspendió de último momento, esos mismos son los que ya tienen gran avance planeado y preparado, incluso cuentan hasta con el mobiliario.
No obstante, la incertidumbre sigue latente y sin duda será un gran reto realizar una Feria en medio o con las secuelas de una pandemia, aun así Cristóbal Montoya refirió que de alguna o de otra manera tratarán de adaptarse, los beneficios siempre son mayores y tendrán que arriesgarle.
Ciertamente la Feria de San Marcos viene a dar un gran impulso a la economía del Estado, pero existen muchos negocios pequeños que no pueden pagar un permiso en el perímetro ferial y durante la temporada cierran, pues no les es rentable mantener abierto porque la mayoría de la población acude a la Feria y estos se quedan solos, además de que muchos de los empleados son acomodados en los restaurantes y merenderos, pues lo que ganan en seis meses lo vienen ganando en un mes, lo cual para ellos es una temporada muy buena.
Aunque por otra parte, existe la preocupación en el gremio de que después de tres o cuatro fines de semana de reventón se vayan a desatar los contagios y vayan a querer cerrar por un mes, es decir que obliguen a un confinamiento mayor, lo cual sí sería fatal, pues mientras los que pudieron trabajar tendrán para pasarla, aquellos que tuvieron cerrado ya no podrían sobrevivir; entonces, el realizar la Feria con la misma magnitud a la que estamos acostumbrados, realmente es un reto mayor, lo único que se espera es que se busque la mejor estrategia de cuidar aforos, que los espacios sean los convenientes y que no se convierta en un mega foco de contagios.