La aparición de la pandemia provocó que en corto tiempo se duplicara en Aguascalientes el número de hornos para la cremación de los cadáveres de las personas infectadas o con sospecha de Covid-19, al ser esta una exigencia de las autoridades sanitarias para evitar que contagios y muertes se salieran de control.
Dueños y empleados de agencias fúnebres indicaron que la creciente demanda del servicio por los estragos de la pandemia llevó a que en Aguascalientes se crearan y utilizaran con mayor frecuencia los incineradores de cuerpos, pues ahora son más las empresas del ramo las que cuenten con este apoyo para los deudos de las víctimas mortales del coronavirus.
Hasta antes de la pandemia había en Aguascalientes no más de ocho hornos para la cremación de los cuerpos, y en en este momento ya se tienen no menos de 16 crematorios en operación, y la gran mayoría de ellos están funcionando constantemente debido a que se están reactivando los decesos por la pandemia, revelaron a HIDROCÁLIDO autoridades de Salud.
“Hace dos años había la mitad de los incineradores y eran suficientes para atender la demanda del servicio por parte de familiares que optaban por la cremación de las personas que fallecían por diversas causas, pero a la aparición de la pandemia y con las medidas impuestas por las autoridades para obligar a la cremación inmediata de las personas infectadas, las empresas aprovecharon la oportunidad para crear más incineradores en sus empresas”, mencionaron empresarios del sector.
De acuerdo a los registros oficiales, en estos momentos cuentan hornos incineradores las funerarias Ramírez, Hernández, Los Encinos, La Gloria, Jardines 2000, Arriaga, Gayosso y Carrillo, algunas de las cuales ofrecen la “maquila” o renta de sus hornos para que otras funerarias puedan prestar ese servicio a quienes les contratan el manejo de los cuerpos de sus familiares fallecidos por el coronavirus.
Aunque la mayoría de los crematorios se encuentran ubicados en diferentes puntos de la ciudad, incluso en instalaciones de las mismas agencias fúnebres, sin embargo también se ha encontrado un nicho de mercado en algunos de los municipios del interior, toda vez que se cuenta con incineradores en Calvillo y El Llano.
Según dueños de funerarias, los crematorios apenas se están reactivando porque comenzaron a repuntar las muertes por la pandemia, pero sí ha habido etapas en las que la demanda ha rebasado la capacidad que se tiene para prestar este servicio, porque no sólo se pide la incineración para quienes mueren por el coronavirus, sino que también se estuvo haciendo para los de neumonía o por otras causas, por las restricciones para las velaciones y porque la gente no quería arriesgarse a los contagios.