Iván Archivaldo Guzmán López, hijo de Joaquín «El Chapo» Guzmán y uno de los principales líderes del Cártel de Sinaloa, logró evadir a las fuerzas especiales mexicanas a principios de este año tras escapar por un túnel escondido bajo un baño, según reveló este lunes The Wall Street Journal.
En un reportaje titulado “La cacería clandestina del narcotraficante más buscado de México”, los periodistas Steve Fisher y José de Córdoba relatan que el operativo tuvo lugar en una casa de seguridad ubicada en Culiacán, donde se creía que se encontraba Iván Archivaldo.
Aunque los elementos irrumpieron con fuerza, derribando la puerta con un vehículo blindado y atravesando pasillos reforzados, lo único que encontraron fue un túnel subterráneo, lo suficientemente amplio para caminar por él, que se extendía tres cuadras hasta desembocar en una vivienda abandonada.
La escena recordaba la fuga de su padre en 2015 del penal del Altiplano, también por un túnel. En esta ocasión, Archivaldo dejó atrás un arsenal de armas de uso militar, fotografías familiares, gorras firmadas por estrellas del beisbol estadounidense, con dedicatorias para él y su hermano Jesús Alfredo, así como más de 15 celulares de prepago y computadoras portátiles.
El diario estadounidense detalla que las fuerzas especiales encontraron en las paredes imágenes de la familia Guzmán, lo que refuerza la versión de que Iván se encontraba ahí y huyó al percatarse del operativo.
Actualmente, el Departamento de Justicia de Estados Unidos ofrece una recompensa de 10 millones de dólares por información que lleve a su captura. Sus hermanos Ovidio y Joaquín Guzmán ya se encuentran detenidos en ese país, enfrentando cargos y en proceso de negociación con las autoridades.
Joaquín «El Chapo» Guzmán, padre de Iván, fue extraditado en 2017 y sentenciado a cadena perpetua en una prisión de máxima seguridad en Colorado, donde permanece aislado.