Ante esta Redacción acudió el profesor Luis Huerta para presentar una queja porque le fue negada la vacuna en la Megavelaria, el día de ayer, a donde acudió a las doce del día para recibir el biológico, que finalmente no se le aplicó porque no llevaba el comprobante de internet que tiene el sello oficial, que se imprime por si la persona quiere viajar, mismo que hace 8 meses no se exigió, bastaba presentar el anterior documento.
En su caso específico, destacó que no pudo hacer una impresión y que acudió a que se le aplicara la vacuna como en las otras dos ocasiones, en las que no se le pidió ningún documento y sólo se le hizo llenar una forma con pluma, pero en esta del refuerzo no se le aplicaron y al pedir que lo atendiera alguien, lo turnaron con una persona de las brigadas que al parecer tenía un cargo más alto, pero quien, con aire déspota, le dijo que volviera al día siguiente a ver si le podía hacer la forma o autorizar la vacunación, porque él sólo quiere la vacuna, pues no piensa viajar y no se le puede negar, ante la pandemia que estamos viviendo.
Dijo que tal vez su caso sea el de muchas otras personas, pues había una fila considerable para hacer copias en un auto a las afueras del centro de vacunación, en el que estaban haciendo su agosto, pues cada copia la vendían en cinco o diez pesos.
Explicó que a nivel laboral tiene una demanda contra el IEA y, por lo tanto, no está percibiendo salario, lo cual también comentó ante el personal de vacunación, pues no llevaba dinero para hacer la copia, pero aun así, le negaron la vacuna y lo citaron para hoy a las dos de la tarde para ver si le imprimían en una oficina su hoja, y al interrogar al sujeto que le atendió sobre en qué punto se verían, éste con aire despectivo sólo le dijo: “búscame aquí”, lo cual al quejoso le pareció inadecuado y por eso expresó ante nuestro Diario su molestia por el maltrato y las trabas para vacunarlo, que en las dos anteriores ocasiones no existieron, pero ahora tal parece que están burocratizando la vacunación y atentando contra la salud de las personas, ante la alta contagiosidad de la variante Ómicron.
MAD