Una multitud conformada por gente de diversos credos y religiones se manifestó ayer en las calles del Centro Histórico de Aguascalientes para externar su rotundo “No al aborto, sí a la vida”, poniendo en claro su rechazo a la despenalización del aborto.
El enorme contingente de personas vestidas de blanco, con pañoletas azules y globos en ambos colores, con una enorme manta al frente con la leyenda ‘Aguascalientes a favor de la mujer y de la vida’ y la silueta de una mujer embarazada, emprendió su marcha en la esquina de las calles Madero y Cosío, con cantos, música, baile, consignas, rezos y plegarias por la prohibición del aborto.
“Yo sí le voy, le voy a la vida”, manifestaban en su recorrido rumbo a la explanada de la plaza principal, donde se concentraron todos los grupos de personas de todas las edades, pertenecientes a diversas religiones, quienes se unieron por una misma causa: la defensa de la vida.
La organización de la marcha convocada por la Iglesia católica, que de manera simultánea se llevó a cabo en varias entidades del país, estuvo a cargo de grupos de jóvenes, en su mayoría mujeres, quienes en todo momento pusieron en claro la importancia de respetar la libertad religiosa y de atender la causa común que en esta ocasión los unió.
“Mi mamá dijo sí, por eso estoy aquí”, manifestaron al señalar que la Corte no los representa cuando ataca la vida, la familia y las libertades de los mexicanos.
Asimismo, al convocar a la defensa de los más inocentes se sugirió a todas aquellas mujeres que pretenden abortar que no lo hagan, y si no quieren al bebé que lo den en adopción: “No abortes, mejor dalo en adopción, yo oro por ti”.
Por su parte, el representante del Frente de la Familia en Aguascalientes, Carlos García Villanueva, se mostró sorprendido por la gran respuesta a la convocatoria a sumarse al movimiento, dejando ver que las mayorías están a favor de la vida.
Con este gran movimiento se pretende que los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación reflexionen y que echen atrás su determinación, porque ninguna ley humana está escrita en piedra, de manera que se puede corregir.
“La única ley que está escrita en piedra son los 10 mandamientos y el quinto dice no matarás”, manifestó García Villanueva.