Tras la destitución de Gabriela Espinosa como presidenta del Supremo Tribunal de Justicia, abogados y empleados del Poder Judicial señalan que se debe aprovechar la oportunidad para terminar con la corrupción y las inercias negativas que durante años han prevalecido en ese órgano de Gobierno.
En entrevista con HIDROCÁLIDO y a través de las redes sociales, abogados coincidieron en señalar que se está ante la oportunidad de que se genere un cambio radical en el Poder Judicial, empezando por defender su autonomía y por extirpar la corrupción que se institucionalizó en la Suprema Corte del Estado durante la gestión de los magistrados que han estado al frente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado.
A su vez, empleados de diversos juzgados indicaron que lo primero que debe hacer quien sea elegido como nuevo magistrado presidente de la Suprema Corte de Justicia del Estado de Aguascalientes, es terminar con el nepotismo insultante a cargo de los mandos, pues el Poder Judicial está secuestrado por camarillas de familiares, amigas, amigos y parientes de quienes toman las decisiones y quienes se reparten los principales puestos que fueron convertidos desde hace mucho en auténticos botines.
“Si el quórum en el Pleno del Poder Judicial se integra con cinco magistrados, deben aprovechar para nombrar un presidente que haga valer la autonomía e independencia del Poder Judicial y restituya las facultades del Consejo, pues luego de lo que se ha visto con las tres o cuatro últimas personas que han ostentado el cargo, resulta indignante y vergonzoso el nivel de corrupción y del nepotismo que está enquistado en la toma de decisiones”, denunciaron los abogados que aplaudieron la decisión que tomó el Tribunal Colegiado contra el espíritu reeleccionista de Gabriela Espinosa Castorena.
Precisaron que, según la Constitución local, la función del Consejo es, entre otras, el velar por la disciplina, nombrar y sancionar a los servidores públicos del Poder Judicial a excepción de los servidores públicos que integran el Supremo Tribunal de Justicia, cosa que ha sido vilmente ignorada para favorecer y proteger los intereses personales y de las camarillas que tienen secuestrada a la Suprema Corte de Justicia en Aguascalientes.
“Ojalá que quien quede en el lugar de la magistrada destituida entienda esa separación y ya no sea el Tribunal el que sancione a los servidores que no forman parte del mismo y que no sea éste quien haga la designación de jueces, secretarios y directores que no forman parte del Tribunal, que hagan valer su autonomía jurisdiccional y sus relaciones con los otros poderes sean de coordinación, no de sometimiento y mucho menos de mensajeros”, mencionaron los abogados.